Cada vez es más común lavar todos los tipos de ropa juntos y al mismo tiempo, independientemente de su color o material de fabricación. Es cierto que haciéndolo de esta manera podemos ahorrar mucho tiempo y esfuerzo, porque no nos preocuparnos de separar las prendas según su color y tejidos. Realmente hacerlo es un error, ya que, a la larga, las prendas van a terminar estropeándose y desgastándose más que si dedicamos un poco de tiempo a agrupar aquellas que sean similares, proporcionándoles el mismo tipo de lavado.
Cómo lavar cada tejido
A continuación los diferentes tipos de tejidos, así como la temperatura más apropiada para mantenerlos en buen estado.
- Algodón: este es el tipo de tejido más común y utilizado en la fabricación de ropa. Es de origen vegetal y su principal característica, y por lo que es tan utilizado, es su suavidad. Dado que puede encoger, es conveniente lavarlo a temperaturas de 30ºC o menos.
- Sintéticos: en estre grupo de materiales englobamos los tejidos como el acrílico, nylon o poliéster. Suele ser aconsejable lavar este tipo de prendas dentro de una bolsa de lavado, ya que suelen desprender microfibras que pueden contaminar el agua.
- Vaqueros: aunque el principal producto de su composición suele ser el algodón, en ocasiones puede estar mezclado con otro tipo de fibras como el elastano que facilita su estiramiento. Se recomienda lávarlos a una temperaturas de 30ºC, dar la vuelta a este tipo de ropa y cerrar todos los botones y cremalleras que pueda tener, así evitarás que se enganchen.
- Prendas delicadas: dentro de este grupo de prendas está la lencería, la seda y el encaje. Recomendamos utilizar temperaturas bajas que debiliten lo menos posible el tejido.
- Lana: al ser un tipo de tela delicado, la recomendación es que la temperatura del agua no supere los 30ºC.
Por otro lado, recomendamos realizar ciertos cuidados según los colores de la prenda. Aunque siempre has de hacer caso al tipo de lavado necesario según tejido, en función del color de la prenda, la temperatura debe variar. De esta forma en las prendas blancas o más claras, recomendamos utilizar temperaturas de lavados altas para eliminar, de forma adecuada, las manchas; sin embargo, en los tejidos de color, debemos emplear agua templada o fría, para evitar que se destiñan.
A pesar de todos los consejos dados, lo que siempre recomendamos es leer las etiquetas que traen las prendas de fábrica. En ellas se indicará cuál es la temperatura y los cuidados más apropiados que has de seguir para lavar cada prenda.
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