Paso a paso: cómo teñir una prenda a mano

Muchas veces compramos ropa de colores que llegados un cierto momento dejan de gustarnos o pasan de moda y por culpa del color abandonamos la prenda en el fondo del armario para no volver a usarla, aun cuando la prenda en sí nos sigue gustando. Una rápida y fácil solución a este problema es teñir la ropa de un nuevo color. En este blog te vamos a contar paso a paso cuál es el proceso que has de seguir para teñir una prenda a mano y que quede como nueva.

El teñido manual es un proceso de tinte ideal para los tejidos más delicados, un ejemplo de ellos serían los naturales como la lana o la seda, o sintéticos como el nylon. Para la realización del proceso antes has de comprobar que tienes todas las herramientas necesarias:

  • Recipiente amplio donde se pueda sumergir la prenda que se desea teñir, además de resistente a elevadas temperaturas ya que introduciremos el agua a elevadas temperaturas.
  • Un objeto alargado y resistente que nos permita remover las prendas sin necesidad de tocarlas directamente con la mano.
  • Guantes, imprescindible para poder protegernos de los tintes y productos que se van a utilizar.
  • Por último, agua y los productos químicos para teñir la ropa como el tinte y el fijador (suele comprarse junto con el tinte).

Antes de comprar los tintes, hay que asegurarse que son compatibles con los tipos de tejido que se desea teñir, para evitar acabados imperfectos.

Una vez se ha comprobado que se tienen todas las herramientas necesarias para realizar el teñido, se seguirán las siguientes instrucciones:

  1. Calentar tanto el agua como nos permita la prenda que se desea teñir, dependerá del material que esté hecha. Se necesitará la suficiene para poder sumergir completamente la prenda en el barreño. Una vez calentada llenar el recipiente con ella.
  2. Vertir el fijador, producto que viene junto con el tinte y que permitirá que el color permanezca durante más tiempo en la prenda.
  3. Añadir sal ( 5 cucharadas soperas por litro de agua), esto también favorecerá la fijación del color en la prenda.
  4. Añadir el tinte y remover hasta que quede totalmente diluido en el agua. Recuerda ponerte los guantes para no mancharte.
  5. Introduce la prenda y empaparla por completo, asegúrate de que toda la superficie quede mojada por el agua con el tinte. Dejala dentro por 50 minutos y remueve de vez en cuando para que el tinte se vaya impregnando bien.
  6. Pasado el tiempo, saca la prenda y aclárala en agua tibia, ayúdate de los guantes y el objeto alargado que hayas estado utilizando para remover la mezcla. Después en un recipiente con agua limpia echa un chorro de detergente y lava la prenda sin frotarla.
  7. Aclara la prenda y tiéndela sobre una superficie horizontal a la sombra para que se seque sin que queden marcas.

A pesar de todos los pasos mencionados en el blog, no olvides leer las instrucciones del tinte que compres, ya que cada fabricante ofrece unas recomendaciones personalizadas según el producto.

Ten en cuenta que no todos los tejidos tienen la misma facilidad para teñirse, por lo que lo conveniente sería que te informaras primero y en caso de necesitarlo recurrir a una tintorería especializada para que tus prendas queden con un acabado óptimo.